Mal síntoma

Iba a titular este breve con un fácil y poco original "¡Españoles: España ha muerto!, pero me niego a ello porque, en el fondo, abrigo la esperanza de que no sea verdad, aunque sospecho que, al menos, la mitad de España permanece a estas horas, y desde hace mucho tiempo, en estado vegetativo; en muerte cerebral; en un letargo de oso pardo del que jamás despertarán porque de lo contrario dejarían de cumplir su cometido principal. En verdad no sé si este pais ha sido siempre así y lo que antes ocurría es que los profesionales de la ignorancia, los donnadie y los zurupetos estaban escondidos, esperando su oportunidad para hacerse con un pedazo de papel y un tizón y excretar sus ideas con el fin de iluminar el camino a tanto zombie, a tanto muerto en vida, ayuno de razonamiento y huérfano de reflexión. Hoy en día, esos donnadie están desbocados; aquí y en todas partes.

Hoy, día cualquiera de este primer confinamiento al que nos han sometido, me ha llegado un guasap. No uno cualquiera, no. El guasap que me ha llegado es el guasap definitivo. Ese que ya no me deja lugar a dudas, si es que alguna vez las tuve al respecto. Al principio pensé que se trataba de algún chiste, de alguna cosa de esas que te llegan estos días, con más o menos gracia, fruto de la imaginación del ser humano, con el fin de "echar una risas" y compartirlas aunque sea en estos momentos en que la situación no es para reir sino al contrario: es para temblar y no por el virus. Pero no. No se trataba de un chiste ni nada parecido. Era una noticia, aparecida hoy, en un dizque periódico: "Rajoy se salta el confinamiento para hacer ejercicio en la calle".

Los que me padecen y conocen, saben de mis simpatías por este expresidente, a quien, como persona, desconozco y por lo tanto, de ese aspecto, no opino.  Pero sobre su función en "lo público" sí tengo el derecho de opinar: la peor de las opiniones y no me quiero extender, sólo igualable, aunque no por las mismas razones, a su innombrable antecesor. Así que no seré yo quien mueva una falangeta de un dedo meñique para defender al Excmo. Sr. Don Mariano Rajoy Brey. Allá cada cual, y él en concreto, con su conciencia.

Que en un país con más de 18.000 personas muertas, a manos de lo que sea esto que circula a sus anchas por el mundo,  la noticia de portada a toda página de todos los periódicos, en cuaquiera de sus formatos, no sea algo así como "La Audiencia Nacional investiga a fondo al gobierno (la minúscula no es errata) por la compra ful de test ful a una empresa china ful" o "Veintitrés millones de españoles se lanzan a la calle y se sientan en el suelo", es un mal síntoma.

Que en un país con más de 18.000 personas muertas, a manos de lo que sea esto que circula a sus anchas por el mundo, alguien directamente ligado a la komintern que se nos viene encima publique "nosequé" de Rajoy con la clara intención de desviar la atención de unos cuantos miles de descerebrados funcionales, es un mal síntoma, y lo es porque cuando alguien es capaz de hacer eso en una situación como la que nos ocupa, nos preocupa y a demasiados mata, es porque en ese alguien hay un desprecio absoluto por la vida de cualquiera que no sea él mismo, es porque relmente los 18.000 o los 23 millones que se mueran pasado mañana no le importan nada. Nada, en el más absoluto de los sentidos.

Los imbéciles ya están preparados y van a por todas. Quien avisa no es traidor.